Qué sabes de: LAS SENSACIONES
Las sensaciones propiamente dichas podemos considerarlas como la base de todo nuestro
conocimiento ya que continuamente estamos rodeados de estímulos dependiendo de
los cuales pueden dar como resultado sensaciones agradables o desagradables
según de la cantidad o cualidad del estímulo percibido.
Nuestros
órganos receptores a los estímulos y mediante los que podemos percibir el mundo
que nos rodea están basados básicamente en los 5 sentidos del hombre (aunque se
cree que pudieran ser más) y se dividen en tres categorías;
Los extraceptores, que captarían los estímulos externos encontrándose en ojos, nariz,
piel, lengua, etc… y que mediante su excitación nos provocaría las sensaciones
visuales, olfativas, gustativas, térmicas y táctiles. Ya sean agradables o
dolorosas.
Los propioceptores, localizados principalmente en los músculos, articulaciones y
tendones nos proporcionarían sensaciones motrices derivadas de la actividad
física dando lugar a sensaciones de movimiento o cinestésicas y/o sensaciones
estáticas o de equilibrio localizadas en un puntos estratégico del organismo
como el sáculo del oído interno (principal responsable del equilibrio).
Los intraceptores, estarían situados en los
órganos internos y vísceras tales como las vías digestivas, corazón, pulmones y
que nos harían sentir sensaciones cenestésicas como el hambre, sed, etc…
provocadas por estímulos originados dentro de nuestro propio organismo.
De esta
manera la sensación se podría resumir en tres fases; La física o de contacto
sensorial, la fisiológica; en la que se producen diversas acciones fisiológicas
y la fase psíquica en la que llegando al cerebro el estímulo se hará
consciente.
La diferencia entre Sensación y Percepción radica
en que esta ultima será el resultado a nivel consciente de la realidad, siendo
por así decirlo la sensación; el recorrido que ha de realizar el mensaje desde
que es captado mediante los órganos receptores sensoriales hasta que es
percibido, analizado y procesado por el cerebro dando lugar a la “percepción
consciente” del estímulo.
En el
proceso psicofísico de la percepción, la información recibida a través de los
sentidos es percibida inicialmente desde un tono global, siendo una vez en el
cerebro, analizada y discernida de forma
individual para ser recogida, organizada y archivada por los órganos
pertinentes del sistema cerebral al que correspondan, fijando nuestra atención
en un único punto individual percibido pero sin olvidar el resto, ya
clasificado inconscientemente en nuestro cerebro.
De este
modo la percepción estaría basada en el aprendizaje y la asociación de las
diferentes percepciones que pudieran resultar similares y que estarían
almacenadas en nuestro cerebro a través de nuestras experiencias anteriores a
modo de biblioteca.
No cabe decir, que un bebe recién nacido solo podrá percibir sensaciones (no
percepciones) hasta que sea capaz, a
través de su propia experiencia a
percibir e identificar los estímulos que ira percibiendo continuamente a través
de su propia experiencia.